Por Claudio Rodríguez Soto, publicista discapacitado sensorial.
El Día Mundial de las Personas con Discapacidad fue establecido por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1981, con el objetivo de crear consciencia de las cuestiones de la discapacidad, y celebrar el potencial de personas con discapacidad y sus derechos.
En el mundo casi uno de cada diez personas vive con una discapacidad y estudios indican que personas con una discapacidad constituyen hasta el 20 por ciento de la población que viven en pobreza en países en vías de desarrollo. Muchas personas con discapacidad continúan enfrentándose a barreras para participar en sus comunidades y a menudo están obligados a vivir en los márgenes de la sociedad. Frecuentemente se enfrentan a la discriminación y el estigma.
Es común que sus derechos básicos no se cumplan, como la alimentación, la educación, el empleo y el acceso a servicios de salud y reproductivos. Muchas personas con discapacidad están obligadas a vivir en instituciones, que es directamente en contra de sus derechos de ser libre y vivir en sus comunidades.
Las Naciones Unidas tienen una larga historia de promover los derechos y el bienestar de todas las personas, que incluye también a las personas con discapacidad. La organización ha trabajado para asegurar su participación completa y efectiva en las esferas civiles, políticas, económicas, sociales y culturales como todo el mundo para crear una sociedad para todos. El compromiso de las Naciones Unidas al cumplimiento completo e igual de todos los derechos humanos para las personas con discapacidad se basa en la búsqueda de la justicia social y la igualdad en todos aspectos del desarrollo social.
El Programa de Acción Mundial para las Personas con Discapacidad y las Normas Uniformes sobre la igualdad de oportunidades para las personas con discapacidad son ejemplos del compromiso de la organización y forman parte de una estrategia política internacional. Ha sido fortalecido por la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, un instrumento legal internacional, para ayudar las personas con discapacidad a mejorar sus vidas y sus comunidades en todas partes del mundo.
Todavía existe mucha resistencia a mejorar las vidas de personas con discapacidad. El nivel de consciencia general con respeto a la situación de las personas con discapacidad es bajo. Personas con discapacidad en este país no tienen mucho poder en sus comunidades. En muchos casos, están excluidos de tener un papel en los problemas que afectan sus comunidades. Lo peor es que a las personas con discapacidad se les niega sistemáticamente la oportunidad de ser dueños de su destino, un resultado de su marginalización.
Como consecuencia, las personas con discapacidad no pueden ser miembros activos de la sociedad. Algunos están obligados a pedir dinero en la calle. Otros están obligados a quedarse en casa, haciendo nada. Los retos a los cuales se enfrentan son varios y grandes. Sería fundamental explorar algunas de las razones por las cuales las personas con discapacidad están viviendo en situaciones difíciles.
Sin duda, las personas con discapacidad se encuentran en la situación actual, debido a la mentalidad de sus comunidades.
No se puede negar el problema, no hay que ser psicológico para saber que el ciudadano medio no sabe mucho sobre la discapacidad. Debido a su falta de conocimiento, piensan algunas cosas incorrectas acerca del tema. Algunos piensan que una persona con discapacidad es una vergüenza para su familia. Otros los ven como objetos de desdén que no merecen nada más que la caridad y la compasión. Obviamente, estas ideas falsas no se basan en la verdad. La gente que piensa de esta manera no entiende como una persona puede llegar a tener una discapacidad.
Sin embargo, ser una persona con discapacidad no quiere decir que una persona no puede hacer nada. Puede cumplir varias funciones. Hay funciones que pueden cumplir como cualquier otra persona.
El problema fundamental de las personas con discapacidad es su falta de confianza en sus habilidades. No pueden encontrar un trabajo porque empleadores creen que no son tan eficientes como una persona sin discapacidad. En algunos casos, se les niega la educación porque la gente piensa que no vale la pena educarlos. Es esencial que la sociedad en general entienda que las personas con discapacidad tienen grandes potenciales. Tienen algo que ofrecer a la sociedad. Pero su contribución solamente se puede hacer si tienen la oportunidad de mostrar sus habilidades. Para mostrar sus habilidades, hay que abrir las puertas a la oportunidad, que han sido cerradas por mucho tiempo. La tarea de abrir las puertas de la oportunidad es un ejercicio colectivo entre el gobierno, la comunidad y las personas con discapacidad. La comunidad tiene que cambiar su percepción de las personas con discapacidad. Todos los miembros razonables y civilizados de la sociedad tienen que rechazar las creencias viejas y primitivas que han negado las oportunidades de las personas con discapacidad. Cambiar las ideas falsas y antiguas debería ser la prioridad de todas las personas que se dicen progresistas.
El gobierno como responsable del dinero de los contribuyentes que incluye las personas con discapacidad tienen un rol obligatorio a ocuparse de las necesidades de personas marginalizadas. El gobierno siempre tiene que asegurar oportunidades iguales para toda la población.
Aunque pueden ser vistos como víctimas las personas con discapacidad tienen un papel crítico en asegurar que las puertas de la oportunidad se abran. Para resumir, tienen el papel de tocar las puertas. En tocar las puertas, no se puede ceder ni flanquear.